¿Cuántas veces has intentado contemplar las estrellas, pero las luces de la ciudad te lo han impedido? Por desgracia, este escenario es cada vez más frecuente, y debes saber que la contaminación lumínica en astronomía no solo afecta a las contemplaciones de aficionados.
Tal y como analiza Antonia M. Varela Pérez, investigadora de Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) y directora de la Fundación Starlight, las luces artificiales, el despliegue de constelaciones de satélites y las interferencias de radio, limitan los descubrimientos científicos, las conexiones culturales con el cielo nocturno y las posibilidades del astroturismo. Y por si todo esto fuese poco, también afectan negativamente en el medio ambiente, fomentando el cambio climático.
La contaminación lumínica, una amenaza para la astronomía
Uno de los impactos más evidentes de la contaminación lumínica es la pérdida de visibilidad del cielo nocturno. En las áreas urbanas, el brillo artificial del cielo oculta la mayoría de las estrellas y objetos celestes más débiles.
En las grandes ciudades, puede que solo se puedan ver unas pocas docenas de estrellas, en comparación con las miles que son visibles desde áreas rurales sin contaminación lumínica.
La contaminación lumínica también afecta a la capacidad de detectar y estudiar objetos astronómicos débiles, como galaxias, nebulosas y cúmulos estelares. Muchos de estos objetos, que requieren condiciones de oscuridad para ser observados, quedan invisibles para telescopios terrestres ubicados en ciudades o áreas cercanas a fuentes de luz.
Por eso los astrónomos profesionales trasladan sus observatorios a lugares alejados de la civilización.
Para los astrónomos profesionales, la contaminación lumínica se está convirtiendo en una verdadera barrera para la investigación. Las imágenes del cielo profundo que se necesitan para estudiar fenómenos astrológicos, se ven afectadas por la luz, lo que reduce la calidad de los datos recopilados por los telescopios. Esto hace que se tengan que realizar ajustes técnicos y limitaciones que incrementan los costos y dificultan los descubrimientos científicos.
La contaminación lumínica en astronomía también hace que sea más difícil observar eventos astronómicos como lluvias de meteoros o eclipses. Estos fenómenos requieren cielos oscuros para apreciarse en todo su esplendor. Por lo que en zonas altamente iluminadas, estos fenómenos pasan desapercibidos.
¿Cómo solucionar los efectos negativos de la contaminación lumínica en astronomía?
Las soluciones para combatir y limitar los efectos de la contaminación lumínica en astronomía pasan por establecer medidas técnicas y políticas.
Las regulaciones y normativas nacionales e internacionales, como la creación del Centro para Protección del Cielo (CPS), también ayudan y dan esperanzas para evitar este problema creciente de la astronomía.
Por su parte, y a un nivel más cercano a los amateurs y aficionados a la astronomía, entidades como la Fundación Starlight ayudan a concienciar y educar a la población sobre la importancia de defender el cielo oscuro y silencioso.
Conclusión
¿Sabías que la contaminación lumínica reduce hasta en un 90% los objetos celestes que se pueden observar a simple vista en el cielo nocturno?
Reducir la contaminación lumínica no solo es crucial para los astrónomos, sino también para la protección del medio ambiente y la calidad de vida en general. A través de la colaboración entre comunidades, gobiernos y ciudadanos, es posible restaurar la belleza del cielo estrellado y proteger este recurso invaluable para las futuras generaciones.
Sky Andaluz Observatorio Astronómico se encuentra en un entorno privilegiado de Granada, especialmente pensado para que la contaminación lumínica no interfiera en las observaciones del cielo.
Si quieres conocer de primera mano las vistas profesionales que ofrecen nuestros telescopios, acercadas a todos los públicos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Agenda una visita ya. ¡Quedarás aún más enamorado/a de los cuerpos celestes que nos rodean en el firmamento!
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